sábado, 7 de noviembre de 2015

Los prejuicios no son más que eso, prejuicios.

Hace mucho que no escribo un texto tan personal como este. Espero que os guste.



Si, estoy soltero y ¿qué? No por ello soy de esas personas  que se van con la primera que se cruzan en su camino. Quiero estar con una persona porque a mí me apetezca, no porque tenga dependencia de estar con alguien. Estoy cansado de relaciones sin sentido, de encuentros sexuales sin nada en común. Cansado de comer pipas cuando a mí lo que me gustan son las palomitas.

Vivimos en una sociedad que lo único que parece que importa es el físico de las personas y no el interior de las mismas. Estoy cansado de poner buena cara al rechazo. Me duele, me duele y me parece mal que me juzguen por mi aspecto y no den la oportunidad de conocer quien hay detrás de un simple físico.

Me gustaría que existiera una aplicación en el móvil que te dijera como es esa persona. Ir por la discoteca y que la aplicación te dijera: a esa persona le gusta el diario de Noa, se emociona viendo cachorritos y odia los domingos porque le recuerdan a su expareja.

Y que esa misma aplicación nos evaluará como ángeles y demonios. Esa chica es un 90% demonio, no te acerques. Esa chica de allí es un 85% ángel pero le han hecho tanto daño que cada día que pasa se convierte un poco más en demonio. 

Yo creo que a todos nos pasa un poco eso, que por circunstancias de la vida, nos vamos haciendo más desconfiados y fríos. Solamente cambiamos cuando un ángel puro viene a nuestro lado pero hay veces que no nos damos cuenta de su pureza hasta que se ha ido y ya es demasiado tarde para recuperarlo.

Me llaman raro por perseguir mis sueños pero yo nunca perderé la esperanza de encontrar a una persona que sea afine a mí, que sea mi amiga, mi compañera, mi novia, mi amante, que me pregunte que tal estoy después de un largo día, que me regale su sonrisa o me dé un detalle sin pedir nada a cambio. 

Estas palabras son para todas esas personas anónimas que sabemos que somos más que un simple físico y que el amor verdadero no tiene porque ser una utopía.

1 comentario:

  1. Ésta sí Óscar! Me ha gustado muchísimo. Ésta sí! Un buen texto con el que estoy segura se va a identificar muchísima gente, ya sean hombres o mujeres. Y no desesperes, que algún día aparecerá esa chica que como decían antaño "te querrá bien". Mientras tanto... yo sigo diciéndote que estoy por aquí, jejeje :p (¿sonríes? jeje...espero que sí) Besossss

    ResponderEliminar