Son las 4 de la tarde, estoy en frente del ordenador escuchando Rivers flows in you de Yiruma, y sale a volar mi imaginación pero hoy no me sale escribir algo alegre, hoy quiero sanar mis heridas expulsando estas palabras que están tan dentro de mí.
Estoy empezando a ser consciente de que en la vida aparecen personas
muy importantes pero en el momento inadecuado. Y es duro enfrentarse a esa
cruda realidad.
Sabes que esa persona puede ser la llave de tu felicidad
pero aún necesita tiempo para que pueda encajar en la cerradura de tu vida.
Quizá en unos meses, en unos años, solo el destino lo sabe.
La vida es corta e intensa y no es justo que las personas
tengan que vivir en el pasado, malviviendo en el presente para tener un digno
futuro.
En la vida hay que tomar la decisión de dejar fuera de tu círculo
más íntimo a personas que amas con todas tus fuerzas aunque te duela desde lo
mas profundo de tu ser.
No me gustan nada las despedidas y menos esas que están arraigadas
al corazón, esas que duelen, que te manchan el alma, que te hacen sentir
vulnerable, que te hacen llorar, esas que no quieres pero que sabes que tienes
que hacer porque si no, no podrás seguir adelante.
Es duro despedirse de alguien al que amas pero la vida continúa
y vendrán otras experiencias, otras personas y el tiempo curará las heridas.
Volveré
a reir, a emocionarme con un beso, a sonrojarme con una mirada o a ruborizarme
con un cumplido.
Me alegro de que lo hayas publicado finalmente.
ResponderEliminarComo te dije, un blog interesante. Me he leido cada entrada que has publicado y me ha encantado. Deberías seguir publicando más relatos. Por cierto, la red social por la que me conociste, la tuve que cerrar, asi que bueno, te dejo mi correo por si quieres seguir en contacto conmigo: bcev.shul.ido@gmail.com Un beso y espero que sigamos el contacto!
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